viernes, 28 de octubre de 2011

No es cine, es otra cosa...


Me ha gustado mucho “el árbol de la vida”. Me ha gustado mucho pero puntuando de 0 a 10 tan solo le daría un 6, y ahora me explico:
Pocas veces en una película el director logra hacer poesía, y aquí Malick lo consigue, llevaba años intentando repetirlo, porque ya lo había hecho antes. Pero es que antes había algo de cine además del poema y aquí solo veo poema.
Creo firmemente en el cine como entretenimiento, aunque lo prefiero como arte, medio de expresión ó lenguaje para contar una historia, hasta el punto de que a veces el poco interés que me despierta la trama no me importa si me gusta como me la cuentan. Afirmo esto porque pienso que se puede hacer casi cualquier tipo de arte a través del cine, pero sin olvidar nunca que un mínimo de entretenimiento es indispensable en una película, que nos tienen que contar algo, interesante o no, divertido o no, brillante o no, pero algo.
En pocas ocasiones me habían explicado la infancia como aquí, la infancia y otras cosas. Las imágenes son increíbles, no se puede expresar más con menos, pero falta cine. Además hace usted trampa Terrence, porque sabemos que ciertas elecciones de actores son para vender entradas, reciten bien su poema o no, y eso no encaja demasiado bien en su concepto.