jueves, 30 de julio de 2015

El Coronel si tiene quién le escriba

Decía un sabio bastante melómano que a veces los sueños se convierten en concierto, puede ser, claro.
Si creyese en las jerarquías militares no tendría duda de que al apodo El Coronel que le pusieron hace décadas a Steve Cropper le faltan varios grados para que se haga justicia a su gusto, a su saber hacer y sobre todo a su biografía.
El manager de Elvis Presley era conocido por el mismo apodo pero como diría The Stranger: “esa es otra historia y la contaremos en otra ocasión”.
Volvamos a Cropper: empezó su carrera formando parte de los maravillosos Booker T. & The MG`s, a los que John Fogerty definió como “la mejor banda del mundo”, cuando compartió escenario con ellos en una pequeña gira hace unos años. Nosotros tuvimos la suerte de verles como banda de acompañamiendo de Neil Young en el ya legendario “Concierto de los 1000 años” en 1993 y creo que el bueno de Fogerty no andaba desencaminado con su afirmación. Aquello dio para anécdota: salieron sin Neil Young y arrancaron con la maravillosa “Green Onions”, probablemente el mejor tema instrumental de la historia del rock&roll. El público no reconoció ni a la banda ni al tema, y se dedicaron a silbar exigiendo la presencia de Young, la euforia de lo que venía les impedía disfrutar la maestría de lo que ya estaba. Mi primo y yo gritamos un poco al principio (“¡¡¡Son Booker T. & The MG´s!!!” – “¡¡¡Es Green Onions!!!), era inútil, disfrutamos el tema todo lo que pudimos preguntándonos si se habría caído alguien del cartel y venían de sustitutos, ya que en aquellos tiempos no se disponía de acceso a internet y la información musical solo podía conseguirse a través de la prensa especializada, lo que ocasionaba a veces sorpresas en los festivales de este tipo.
Booker T. & The MG´s eran la banda de estudio del sello Stax en los 60, por lo que son los músicos que escuchamos en muchos de los clásicos atemporales del soul. El Coronel incluso participó en la composición de muchos de ellos: “(Sittin´on) The dock of the bay”, “Knock on Wood”, “Soul man”, “In the midnight hour”, “634-5789” y como productor en muchos otros “Think”, “Respect”, “Hold on, Im coming”… De su trabajo como guitarrista poco se puede decir, creo que es el mejor y más reconocible guitarrista rítmico, su sonido más que acompañar parece que hace los coros a la voz principal, con esa cadencia tan melódica como elegante. La revista Rolling Stone le incluyó en la lista de los 100 mejores guitarristas de la historia en el puesto 39, no doy demasiada importancia a estos rankings, además revistas más técnicas suelen situarle mucho más arriba, por ejemplo Mojo le situó en el podio con Jimi Hendrix y Peter Green, una valoración con la que me siento mucho más cómodo.
Cropper paso a ser una de las personas más reclamadas como guitarrista y productor por todo tipo de artistas: Mancini, Rufus Thomas, Dusty Springfield, Free, Buddy Guy, Tom Jones, Steppenwolf, Sergio Mendes, Eric Clapton, Grand Funk, John Lennon, T. Rex, Rod Stewart, etc. He dejado el enlace por si son capaces de asumirlo sin marearse abrumados, yo no puedo.
A finales de los setenta llegó el proyecto que le dio popularidad, la banda de acompañamiento a The Blues Brothers creados por John Belushi y Dan Aykroyd para el programa "Saturday Night live": The Blues Brothers Band, banda que participaba en la película “The Blues Brothers” como un personaje más de la gamberrada. En otra ocasión intenté explicar lo que esa película significa para mí, el recuerdo de la primera vez que la vi es una de mis más preciadas posesiones inmateriales, por varias razones.
Dan Aykroyd y John Landis pusieron en marcha años después una segunda parte en la que veo un homenaje y no una secuela. Aykroyd estuvo en un programa de televisión para promocionarla y le preguntaron cómo hacían para conseguir que participaran tantas estrellas de la música: “No tenemos que hacer nada, tenemos al Coronel". Está claro que cuando el Coronel llama, el rock & roll se pone.
El 18 de agosto The Blues Brothers Band tocarán en la plaza de María Pita, con algunas bajas pero con presencias lo suficientemente legendarias para que allí estemos, debidamente uniformados, firmes y respetuosos con la jerarquía, que esta vez no es establecida, es ganada a pulso, y nunca mejor dicho.

martes, 21 de julio de 2015

La Quintana

La plaza de la Quintana en Santiago es ya uno de esos sitios que se han convertido en recinto perfecto para un concierto sin haber sido construídos para ello. Allí hemos podido disfrutar a algunos de nuestros músicos favoritos, que aunque se quejan de lo difícil que es acoplar el sonido a toda esa piedra, agradecen poder formar parte durante un par de horas de ese entorno.





El jueves 23 de julio Imelda May será la encargada de hacer que esa plaza sea otra vez el mejor sitio para pasar un anochecer de julio en Galicia, y además gratis. Hay un momento de "En la carretera" en el que Dean Moriarty es recogido como autoestopista por un camionero del que comenta algo así como: "era un tío un poco pesado, pero me caía bien, contaba las cosas con ilusión". Eso es lo que nos encontraremos en el concierto del miércoles: pasión, entrega, una imagen que denota una personalidad arrolladora, gusto por el rock and roll clásico y sobre todo ilusión, porque de todo ello tiene de sobra esta artista puede que nacida fuera de tiempo, pero con el carisma suficiente para que prestemos atención a su discurso.

Me voy a tomar la libertad de recomendar que no se la pierdan, por unos y otros motivos no se arrepentirán.